OVNIS, VOLCANES, TERREMOTOS Y VISITA A CHILE

DE EXISTIR LOS OVNIS ¿TENDRÁN ALGÚN INTERÉS EN LA ENERGÍA DE LOS VOLCANES?

En solo pocas ocasiones, la humanidad yace aterrada y estremecida ante la fuerza del planeta. Unas de esas pocas situaciones son los terremotos y las erupciones volcánicas donde la espeluznante energía geológica de la tierra infunde terror en el más valiente de los hombres y recuerda a la humanidad que solo es un hormiguero más con fecha predestinada de caducidad.

Durante el segundo lustro de este nuevo siglo se presentó una verdadera oleada de avistamientos de ovnis. Al parecer, ésta se inició entre octubre y noviembre de 2007 y es relacionada, por algunos ufólogos, con una activación del cinturón de fuego del pacífico. En lo referente a nuestro hemisferio, en 2006 se presentaron varios sismos con una intensidad mayor a siete en la escala Richter. Asimismo, el 2008 se estrenó el 1 de enero con la erupción del volcán Llaima en Chile, seguido del volcán Galeras al sur de Colombia, el Volcán Nevado del Huila que causó grandes estragos y el volcán cerro Machín que registró aumento en su actividad.

En Ecuador el Tungurahua desplegó su furia en febrero de ese año, y otros volcanes se activaron, como es el Guagua Pichincha, el Cotopaxi y el Reventador.

Chile tiene más de 2000 volcanes de los cuales aproximadamente 55 están activos. De estos, el Llaima y el Chaitén demostraron en el año 2008 que son los verdaderos dueños y señores de los Andes. Varios vulcanólogos y sismólogos negaron algún tipo de relación entre estas erupciones y el aumento de la actividad volcánica del cinturón de fuego del pacífico, esto asociado a un incremento en los sismos registrados en los años 2006 y 2007. No olvidemos el desastre ocurrido en Perú el 15 de agosto del 2007, cuando un movimiento telúrico de 7.9 en la escala Richter cobró cientos de vidas. 

El aumento de sismos no solo se presentó en Latinoamérica. En mayo de 2008, un terremoto de 7.9 grados en la escala Richter asoló el suroeste de China, causando más de 400.000 heridos y cegando la vida de más de 80.000 personas. Para muchos científicos estos hechos no guardan relación o son solo coincidencias. Otros no están tan seguro y unos pocos aseguran que todos estos hechos guardan un estrecho vínculo. 

Es preciso anotar que en la actualidad se usa La Escala sismológica de magnitud de momento (M_W), una escala logarítmica que mide y compara terremotos. Está basada en la medición de la energía total que se libera en un sismo y fue introducida en 1979 por Thomas C. Hanks y Hiroo Kanamori como la sucesora de la escala sismológica de Richter. 

RELACIÓN OVNIS, TERREMOTOS Y VOLCANES.

Algunos observadores del fenómeno ovni tratan de ligar los avistamientos y las erupciones volcánicas. Se especula que las naves extraterrestres buscan algunos minerales en el interior de los volcanes, en el magma o en el material piroclástico. Incluso se plantea que dichas naves aprovecharían de alguna manera la energía geotérmica generada durante la actividad volcánica. Estas energías, que se precian de ser baratas, limpias y renovables pueden ser la salvación de la humanidad. Así, es posible que seres de otros planetas intenten señalarnos de alguna manera el camino a seguir y que de no hacerlo estaremos condenados a la extinción como especie dominante del planeta.

    

¿VISITANTES O SIMPLES ESPECTADORES?

Algunos ufólogos recalcan que los supuestos alienígenas están en nuestro planeta como  observadores Tales seres estarían estudiando la tierra y su increíble diversidad, advirtiendo a la humanidad, por medio de algunos contactados, el advenimiento de desastres mayores que se relacionan con el calentamiento global, la contaminación y diversos ciclos geológicos y cósmicos. De cualquier manera, son comunes los avistamientos de ovnis durante estos eventos geológicos, bien sea durante las erupciones y terremotos o algún momento en torno a los sucesos. de hecho, numerosas fotografías, videos y testigos oculares se pueden encontrar en redes sociales y medios de comunicación posterior a dichos eventos.

LIBERACIÓN DE ENERGÍA

ANIMACIÓN TERREMOTO OCÉANO  ÍNDICO 2004

La pregunta que surge es ¿cuánta energía es liberada por el planeta durante un terremoto o una erupción volcánica? Para comprender más fácilmente la magnitud de las cifras, debemos retroceder al año 2004 y recordar el terremoto del océano Índico conocido por la comunidad científica como el terremoto de Sumatra-Andamán. Este fue fue un sismo submarino que ocurrió el domingo 26 de diciembre y que ocasionó una serie de tsunamis devastadores a lo largo de las costas de la mayoría de los países que bordean el océano Índico. Tal catástrofe cobró la vida de más de 275.000 personas, hubo miles de heridos y desaparecidos y casi 2 millones de desplazados, convirtiéndose en el tercer terremoto más grande de la historia con una magnitud de 9.1 y una duración de casi 10 minutos.

EL TERREMOTO DEL OCÉANO ÍNDICO DE 2004 COBRÓ MÁS DE 275.000 VÍCTIMAS MORTALES

La energía liberada por el terremoto de Sumatra se estimó en 475 megatones de TNT. Esto equivale a unas 23.000 bombas de Hiroshima y de existir los ovnis la pregunta sería: ¿Son capaces de aprovechar de alguna manera este tipo energía?

En el caso de las erupciones volcánicas, por ejemplo, la del volcán Krakatoa de 1883, (que mató a más de 30.000 personas, en su mayoría por los enormes tsunamis, provocados por la erupción, que destruyeron 163 aldeas a lo largo de la costa de Java y Sumatra) desató la energía de unos 200 megatones o aproximadamente 10.000 bombas atómicas como la de Hiroshima. La explosión fue de tal magnitud que se percibió en un 10% de la superficie terrestre viajando hasta la isla de Madagascar y Australia (ambas distan entre sí 7.600 kilómetros). 

El estruendo de la destrucción de Krakatoa se cree que es el sonido más alto registrado en la historia con niveles de 180 dB y se dice que marineros que se encontraban a 40 kilómetros a la redonda quedaron sordos.

VISITA A CHILE 2016

Durante la última semana de octubre de este 2016, estuve de visita en Chile. Al llegar a mi país, Colombia, presencié el sismo de magnitud 5.4 que estremeció la parte central de la nación y que tuvo una profundidad de aproximadamente 30 kilómetros. Nuevamente sentí la tenebrosa sensación de ser solo un pequeño grano de arena a merced del poder de la naturaleza. Durante cerca de 15 segundos, todo el edificio se meció de lado a lado y las ventanas emitieron un leve pero tétrico crujido. Tratando de mantener la calma, caminé fuera del apartamento encontrándome con los vecinos, la mayoría en pijama, que sobresaltados preguntaban ¿qué hacemos? ¿Nos quedamos aquí? ¿Bajamos? Incluso vi que un par de ellos recordaron en esos momentos que creían en Dios. Al ceder el movimiento, comenzó a disiparse la angustia de los residentes y después de unos minutos todos volvimos a los apartamentos. No se puede negar que sentir la tierra moverse bajo nuestros pies no solo estremece nuestros cuerpos, sino lo más profundo de nuestro ser. Es en ese segundo cuando nuestra memoria genética nos recuerda que la humanidad ha sido devastada desde hace miles de años por estos eventos, ante los cuales, es poco lo que podemos hacer.

Esta misma sensación la ha sentido el pueblo chileno desde hace milenios. Pero, ¿Por qué hay tantos terremotos en Chile? La respuesta es simple; porque Chile está ubicado justo al límite de la placa tectónica de Nazca, la cual choca contra la placa Sudamericana. Estas dos placas son grandes bloques de corteza terrestre que intentan avanzar la una sobre la otra a razón de  ocho centímetros por año. La de Nazca, que limita a su izquierda con la placa Pacífica, es empujada por debajo de la placa Sudamericana. Como dato adicional, el terremoto más fuerte que jamás se haya registrado (9,5 de magnitud) ocurrió, precisamente, en Chile en 1960.

En décadas recientes, además de los sismos y volcanes, los ovnis han aparecido para acompañar estos eventos. De hecho, la actividad ufológica de este país es mucho mayor a la de los demás países de Latinoamérica.

Aunque en mi viaje no pude registrar en fotografías o videos algún evento en concreto, pude fotografiar algunos  dibujos de ovnis en paredes y otros lugares de la ciudad de Santiago y Valparaíso. De igual manera, recopilé sendos testimonios de actividad ufológica por parte de amables y algo mayores ciudadanos de ese país.  Lo anterior nos permite vislumbrar la cercana relación entre el fenómeno ovni, el pueblo chileno y su cultura.

Adicionalmente, cabe anotar que pueblos aborígenes del actual territorio de Chile como los Mapuches, registraban (o registran) en su cosmovisión, a Dioses Extraterrestres y toda una serie de seres no humanos que se interrelacionan de distintas maneras con los nativos americanos. Por tanto, este tipo de fenómenos paranormales no son exclusivos del siglo XX y XXI. Espero en próximos años poder conocer más de estos países y sus culturas ancestrales y visitar de nuevo Chile, así como Perú y Bolivia, para recorrer lugares como Isla de Pascua, Machu Picchu y Tiahuanaco.